El TEA dedica una exposición al artista Eugenio Espinoza donde descubre sus obras inéditas


06/16

La muestra se inaugura mañana [sábado 25] a las 12:00 horas, constituye una retrospectiva integral de obra incompleta y proyectos fallidos de este creador venezolano

TEA Tenerife Espacio de las Artes, centro de arte contemporáneo del Cabildo, inaugura mañana [sábado 25], a las 12:00 horas, la exposición Eugenio Espinoza: Retro/retrospectiva 2016-1973. La muestra constituye una retrospectiva integral de obra incompleta y proyectos fallidos de este artista venezolano y descubre los trabajos que el creador no había podido llevar a cabo hasta la fecha. Estas piezas, que fueron ideadas y bocetadas desde 1973 entre Caracas y Nueva York en cuadernos y papeles sueltos, se materializan ahora en TEA tras haber sido recuperadas y catalogadas. Más de medio centenar de obras conforman este nuevo proyecto expositivo que podrá visitarse en TEA hasta el 25 de septiembre, de martes a domingo de 10:00 a 20:00 horas.

Si la obra producida de Eugenio Espinoza ha sido considerada históricamente como subversiva, su obra no producida representaría su trabajo más real, aquel que ha estado tan atento a las transformaciones sociales y culturales de su momento y que el propio contexto impidió llevarlo a cabo. La exposición, comisariada por Roc Lasecea, recupera así investigaciones artísticas de los últimos cuarenta años del autor, sacando a la luz una producción capaz de repensar sus trabajos más conocidos en un nuevo contexto de obra que extiende y a su vez erosiona la idea generalizada con la que hasta la fecha se ha entendido el trabajo del artista.

La muestra comprende material documental, fotográfico y de archivo además de la producción de obras e instalaciones (ejecutadas este año) y dos performances. Esta exposición cuenta con la colaboración de la Fundación Saludarte -organización sin ánimo de lucro que desarrolla un destacado apoyo de las artes- y del Laboratorio de Artes en Vivo del Teatro Leal de La Laguna. Impenetrable: Against the wall, La vela, Las tres gracias, Dibujo inconsciente, Chinchorro, Puerta con dos tachones, Gran riñón o Cuadros bípedos son algunas de las obras que se incluyen en esta exposición.

La obra de Eugenio Espinoza ha estado definida desde un primer momento por su interés en usar dinámicas del arte conceptual y de la performance para subvertir las normas artísticas y redefinir la práctica de la vanguardia, incorporando a menudo estrategias populares provenientes del activismo y de lo lúdico. Una muestra sobre los trabajos incompletos describe también una historia de las imposibilidades, que señala tan apropiadamente las circunstancias del país y las específicas del autor. Producir su obra hoy constituye igualmente un decidido acto de anacronismo, un desplazamiento temporal y espacial que permite tener acceso a un trabajo nuevo e histórico a un mismo tiempo.

Eugenio Espinoza (Venezuela, 1950) estudió en la Escuela Cristóbal Rojas y en el Instituto Neumann y participó tempranamente en el XXVII y XXVIII Salón Arturo Michelena así como en las colectivas Joven actualidad en la Galería Estudio Actual (Caracas) y en el I Salón Nacional de Jóvenes Artistas de Maracay (1971). En 1972 presentó en su primera muestra individual en el MBA, donde presentó una serie de obras elaboradas con pintura acrovinílica negra sobre telas cortadas, dobladas, arrugadas y onduladas. Tomando como punto de partida el cuadrado, Espinoza desarrolló variaciones mediante el empleo de telas sostenidas por diferentes tensores y pliegues, modificando así los límites del formato ortogonal y eliminando los bastidores y el tensado tradicional.

Ese mismo año exhibió en Caracas Impenetrable, una parodia de la obra de Jesús Soto. Era una inmensa tela cuadriculada extendida de pared a pared en el espacio de la sala expositiva, que viajó por todo Venezuela, primero como protagonista de un conjunto de experiencias junto a Claudio Perna y que fueron registradas en fotografías blanco y negro, polaroid y súper ocho y posteriormente pintadas en postales. A esta muestra le siguieron una serie de exhibiciones donde presentaba la opción de esa cuadrícula, no como tema recurrente de la pintura abstracta que inventaron Malévich y Mondrian sino como un objeto anónimo, como un ready made.

En 1973 presentó su individual Textiles, cuadrículas, tarjetas postales y participó en diferentes exposiciones, entre ellas Once tipos y Gráfica internacional. En 1974 exhibió Fotografías, dibujos y serigrafías, quince fotografías de la serie Documentación falsa y veinte serigrafías sobre papel. En la Sala Mendoza figuró en Once tipos, exposición que reunió parte de la experiencia trabajada en 1972 con Claudio Perna. En 1975 integró diversas muestras colectivas, entre las cuales destacan 9 dibujantes jóvenes venezolanos, Dibujos y acuarelas y Gráfica siete.

Entre 1977 y 1980 se estableció en Nueva York, donde estudió en el Instituto Pratt, en la Universidad de Nueva York y en la School of Visual Arts. Su permanencia en esta ciudad es una referencia importante para el estudio de su trayectoria ya que, si bien en este período no produjo mayor número de obras, la experiencia para el artista fue enriquecedora visual y conceptualmente. A lo largo de su dilatada trayectoria ha participado en numerosas colectivas como Acción de Margarita, Arte, acciones e instalaciones, Los nuevos dibujantes, Autorretratos, Alternativa I, Wind Factor, Los 80. Panorama de las artes visuales en Venezuela, Nueva pintura abstracta: ocho planteamientos, CCS-10. Arte venezolano actual o La invención de la continuidad.

En 1985 participó en la XVIII Bienal Internacional de São Paulo y al III Salón Nacional de Jóvenes Artistas (donde obtuvo el premio de adquisición) y presentó en el Museo de Arte La Rinconada (Caracas) su individual Karakana. En 1987 viajó a Nueva York, junto a José Páez del Nogal y Óscar Pellegrino, con la muestra Abstract Art Today exhibida en el Art Center. Los tres coinciden por primera vez en una colectiva y sus obras guardan cierta unidad de expresión en cuanto a que son ubicables en el expresionismo abstracto.

En 1992, el caos y la ironía se conjugan en Familia, con el cual recibió el Premio de Pintura y el Gran Premio en la III Bienal de Guayana. Su trabajo se ha enriquecido con los aportes de distintos movimientos posteriores a los años setenta, como el minimalismo y el conceptualismo, proponiendo una revisión permanente de la percepción del espectador sobre la obra de arte. Desde 2000 reside en Miami (Florida, Estados Unidos). Para la crítica de arte Ruth Auerbach, “Eugenio Espinoza es quizás hoy el artista venezolano que mejor representa el espíritu de la abstracción entendida en términos de lo contemporáneo”.

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