Carlos Millán Hernández, nuevo presidente de la Real Academia Canaria de Bellas Artes


El también presidente del Consejo Consultivo de Canarias cuenta con una amplia experiencia en defensa del patrimonio canario

 

Santa Cruz de Tenerife,  15 de marzo de 2017.- La Real Academia Canaria de Bellas Artes de San Miguel Arcángel nombró el lunes, 13 de marzo, como nuevo presidente a Carlos Millán Hernández, también presidente del Consejo Consultivo de Canarias y un gran defensor del patrimonio canario a través de su pertenencia a diversas comisiones y participando en la redacción de la actual Ley de Patrimonio de Canarias.

 

Millán Hernández sustituye en el cargo a Rosario Álvarez Martínez, quien ha ostentado la presidencia en los últimos ocho años.

 

La nueva directiva de la Real Academia Canaria de Bellas está formada por Rosario Álvarez Martínez, como vicepresidenta primera, en la sección de Música; Flora Pescador Monagas, vicepresidenta segunda, en la sección de Arquitectura; María Luisa Bajo Segura, secretaria, en la sección de Pintura, Dibujo y Grabado; Efraín Pintos Barate, tesorero, en la sección de Cine, Fotografía y Creación Digital; María Quesada Acosta, vocal bibliotecaria, en la sección de Escultura; Federico García Barba, vocal Conservador, en la sección de Arquitectura; Manuel González Muñoz, vocal de Relaciones, en la sección de Escultura; y mantiene sus funciones de Protocolo, Conrado Álvarez Fariña, en la sección de Música.

 

Sobre Carlos Millán Hernández

 

El nuevo presidente es doctor en Derecho, y además de presidente del Consejo Consultivo de Canarias es magistrado en la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife, y paralelamente ha desarrollado una importante vocación por el arte, el patrimonio y la historia. Fue nombrado académico correspondiente de la Racba en 2009 y académico de honor en 2013.

 

De su largo currículo, se puede destacar que ha asesorado a la Comunidad Autónoma en la adquisición de obras de arte para la sede de sus diferentes centros. Esta labor de asesoramiento la ha hecho extensiva al inventario de bienes muebles de la catedral de Santa Ana de Las Palmas y al libro que sobre los obispos de Canarias escribió el que fuera canónigo de la mencionada catedral, Santiago Cazorla León.


En cuanto al patrimonio arquitectónico se refiere, hay que señalar que ha realizado estudios e investigaciones para la restauración de diversos inmuebles de Canarias y ha intervenido en la declaración de estos como BIC.


Millán también forma parte de la Fundación de Casas Históricas y Singulares de carácter nacional, que tiene como fin primordial el propagar el conocimiento y fomentar la conservación y el mantenimiento de edificios de carácter histórico y singular, especialmente de aquellos que son de titularidad privada. Asimismo, es autor de la enjundiosa publicación El capellán menor del rey: Fray Juan de Alzolarás, obispo de  Canarias.


Sobre Rosario Álvarez Martínez


La presidenta saliente deja una labor encomiable en los ocho años que ha ostentado este cargo con "la promoción de todas las artes, la vigilancia y protección del patrimonio artístico y la realización de trabajos de estudio e investigación sobre materias de arte, en el ámbito de la Comunidad Autónoma de Canarias".


En este sentido, Álvarez Martínez ha logrado ampliar los espacios de exposición, con dos nuevas salas, una destinada a instrumentos históricos, además de pinturas, esculturas y grabados representativos del arte contemporáneo canario. Y otra sala destinada a exposiciones temporales y espacio para cursos y conferencias. Ambas en la sede de la plaza de Ireneo González en Santa Cruz de Tenerife.


También ha aumentado los fondos bibliográficos y ha logrado el apoyo de diversas fundaciones y organismos públicos, a través de convenios, para seguir manteniendo las actividades de la institución, toda vez que sufrió los embates de la crisis, como muchas otras entidades.


Y de su dilatada labor también cabe destacar la formalización de los Estatutos que se hizo pública en 2015. Además de poner en marcha las distinciones anuales de la Racba que ha permitido difundir el trabajo de dieciséis artistas.

 

Cursos, talleres, conferencias y publicaciones, que se han implementado en la etapa de Rosario Álvarez, han permitido poner en valor esta institución artística canaria y acercarla a la sociedad.

 

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